Apreciable no es apreciado
Cuando
le decimos “apreciable amigo” a alguien solo le estamos diciendo que es digno
de aprecio. Si queremos manifestarle nuestro cariño, debemos decirle “apreciado
amigo”.
Sucede que según el significado de esas palabras, no es lo mismo ser digno o merecedor de aprecio, que ser una persona en la que recae el noble sentimiento de la estima y el cariño.
Se puede ser apreciable y aún así no ser querido, y se puede ser apreciado aun cuando no seamos dignos de ese aprecio.